PRUEBA DEL TINTE OLIA DE GARNIER

Este fin de semana que he tenido tiempo por fin he probado el tinte del proyecto de Trnd.

La verdad que con lo que me cuesta ir a mi a la pelu a que me toqueteen la cabeza y te dejen más trasquilada que a una oveja cuando solamente les mandas que te corten las puntas, y entre varios comentarios que leí a otras chicas del producto andaba con la mosca detrás de la oreja y poniéndome mil excusas para no probarlo.

Pero este mediodía aburrida en casa decidí ponerme manos a la obra.

La verdad que poco malo puedo decir del tinte porque  ME HA ENCANTADO!!!!!

A la hora de mezclar las cremas me sorprendió lo cremosas que eran, salían del tubo sin andar apretujando con los dedos para no desperdiciar el producto como me pasaba con los otros tintes.

Una vez todo echado en el aplicador con forma de gotita, empecé meneito va meneito viene  para mezclarlo todo bien al ritmo de David Guetta completamente disfrazada con un montón de bolsas de basura atadas al cuello para no pringarme a la hora de ponerme el tinte, que una es muy apañada para unas cosas pero para ponerme un tinte...... mejor pasemos palabra jajaja

Ya manos a la obra esta vez con Taio Cruz acompañándome en esta dura tarea, empecé a teñirme siguiendo con el meneito cuando patosa de mí se me cayó el frasco aplicador en el lavamanos, pero "oooohhhhhhh" apenas se habían caído un par de gotas ya que la punta del aplicador hace que salga poca cantidad de cada vez de manera que el "mecagüen......" del principio se convirtió en "anda, mira tú que apañaos".

Una vez teñida entera y esperando los 30 minutos del tinte, me puse a lavar la gota (el aplicador tiene esa forma) ya que como no sabía si este tinte lo volvería a comprar lo que sí tenía seguro es que usaría ese aplicador de por vida (en parte también viene por mi pequeño síndrome de diógenes que hace que guarde de todo "por si...")

Pasado el tiempo intenté lavarme la cabeza, y digo intenté porque os juro que por más champú que echaba menos jabón salía, y frotaba y requetefrotaba pero nada, volvía a echar más champú a ver si de esta ya salía la espumita pero parecía como si mi cabeza se la estuviese comiendo toda. 3 veces me he echado champú y nada, así que la cabeza se supone que quedó lavada.

Después de todo el follón, secarme el pelo, pasarme las planchas, adecentar el baño y demás ya me había pasado casi media tarde, así que me he ido de compritas lo que quedaba de día.

Ahora ya de vuelta a casa y requetemirándome en el espejo veo que no me ha pasado como muchas de esas chicas que decían que no les cubría, tal vez será porque yo he usado un tono prácticamente igual que el mío (negro azulado, y el de Garnier negro ébano) y sí que me ha cubierto bien porque las raíces canosas que me asomaban lo corroboran.

Otra de las cosas que me ha encantado es que cada vez que me teñía al mover el pelo me venía un olor a tinte que tiraba para atrás, dándome dolor de cabeza el resto del día, y esta vez no me ha pasado, pero una cosa curiosa, y es que a las otras chicas decían que les dejaba un agradable aroma cuando a mi no me deja ninguno, aunque ahora al escribir esta reseña estoy cayendo en la cuenta de que igual puede ser por los tres generosos lavados que le he regalado a mi pelo jajajaja

Sin duda me ha encantado y seguro que lo usaría más de una vez, lo que hay que esperar es a ver con qué precio lo sacan al mercado.